HACIA UN HÁBITAT EFICIENTE

Artículo de opinión realizado por Enrique Cobreros, director de AEICE y aparecido en el nº 0 de la revista Hábitat Eficiente
MIRANDO AL FUTURO DESDE LAS BASES DEL PRESENTE

Si algo hemos aprendido en este último año desde el inicio de la pandemia, yo lo resumiría en dos cuestiones fundamentales: la conciencia de nuestra propia vulnerabilidad y el reconocimiento de nuestra capacidad de respuesta ante situaciones comprometidas.

Nos hemos visto zarandeados por un virus que posiblemente sea consecuencia del resultado de nuestras propias acciones como sociedad, y hemos respondido al mismo, también como sociedad, con las armas de que disponemos: la tecnología, la investigación y, por supuesto, la unión y la fuerza de cada uno de nosotros.

Hablemos un poco de nuestras acciones.

Hace ya décadas que los expertos vienen alertando de las consecuencias de las mismas: el aumento de gases de efecto invernadero (GEI), la contaminación desmedida y sus consecuencias para la salud, el envejecimiento de la población en áreas desarrolladas y la consiguiente despoblación rural, o la pérdida de biodiversidad, esencial para el futuro del planeta, son solo algunas de ellas, que tienen que ver con el ámbito de actuación de AEICE y de sus socios.

El hábitat, definido en nuestro Plan Estratégico 2018-2022, como el conjunto de entornos donde habita el ser humano, se ha manifestado como elemento esencial para el mismo, y está en el centro de las estrategias de futuro a todos los niveles.

A escala planetaria, el eje se sitúa en las diversas Cumbres del Clima (COP o Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático), desde la primera en Río en 1992, pasando por la de Kyoto de 1997, en la que 150 países firmaron el Protocolo que lleva su nombre, con acuerdos sobre reducción de emisiones, hasta la de París en 2015, en la cual su Acuerdo, firmado por 200 países, ha servido como espoleta para diferentes acciones puestas en marcha a partir de entonces por aquellos, con el objetivo consensuado de mantener el aumento de la temperatura media mundial por debajo de 2 grados, reduciendo para 2030 un 40% los GEI –Gases de Efecto Invernadero-, aumentando un 32 % el uso de energías renovables o mejorando un 32,5 % la eficiencia energética.

‘RENOVATION WAVE’ Y LA ‘NEW EUROPEAN BAUHAUS’ BUSCAN UN HÁBITAT SOSTENIBLE, INCLUSIVO Y BELLO

Dichos objetivos, como sabemos, tienen relación directa con el hábitat. Por ello, los desarrollos posteriores de estos acuerdos inciden de forma decisiva en aquel. A nivel europeo, es imprescindible mencionar la estrategia “Renovation Wave”, lanzada el año pasado para mejorar la eficiencia energética, duplicando la tasa de rehabilitación de aquí a 2030, o también la iniciativa “New European Bauhaus”, que busca un hábitat sostenible, inclusivo y bello.

Estas direcciones estratégicas claras han tenido su reflejo en los ya conocidos fondos europeos de Recuperación y Resiliencia (Next Generation EU) los cuales están supeditados a la puesta en marcha de proyectos y acciones encaminadas al cambio de modelo productivo, y que están basados, principalmente, en tres líneas: la transición verde, la transición digital y la cohesión territorial. 160.000 millones de euros para apoyar un cambio de modelo imprescindible, de cara a lograr lo pactado en 1997.

Todo ello, lógicamente, tiene su traducción a nivel nacional, mediante la trasposición de las diferentes directivas europeas. En lo que nos atañe como sector, destacaría dos instrumentos que son de especial relevancia: la ERESEE 2020 (Actualización 2020 de la Estrategia a largo plazo para la Rehabilitación Energética en el Sector de la Edificación en España), que marca los objetivos de descarbonización del parque edificado de España. Fue presentada el 15 de junio de 2020 por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA) a la Comisión Europea, que la valoró con un sobresaliente; y el PNIEC (Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030), desarrollado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. La misma se aprobó el 16 de marzo de este año, y en ella se marcan objetivos intermedios a 2030, como intervalo de la descarbonización total en 2050: mejora de un 39,6 % de la eficiencia energética, reducción de un 21 % de las emisiones de GEI, y aumento de un 42 % de energías renovables sobre el uso de la energía final del país.

Estas direcciones, al igual que en el ámbito europeo, han tenido su reflejo en el Plan “España Puede” remitido recientemente a la Comisión Europea para su aprobación, de cara a recibir los mencionados Fondos Next Generation EU.

LAS POLÍTICAS FIJAN LA COHESIÓN Y EL DESARROLLO RURAL COMO UN EJE VERTEBRADOR

A todo este eje ambiental (transición verde), complementado con la imprescindible aportación de las tecnologías digitales (transición digital), debemos añadir el del envejecimiento y la despoblación. De acuerdo con el Covenant on Demographic Change (Pacto Europeo por el cambio demográfico), del que AEICE es miembro fundador, las personas con más de 50 años representan el 37 % de la población y el número de personas con más de 60 años crecerá alrededor de dos millones cada año en las próximas décadas.

Estos datos tienen su repercusión en la despoblación continua, sobre todo del medio rural, con sus consecuencias de abandono y de pérdida de puesta en valor de los recursos endógenos del mismo, en especial, por lo que nos afecta como sector, de su patrimonio cultural y natural.

Por ello, las políticas nacionales y autonómicas fijan la cohesión y el desarrollo territorial rural como uno de sus ejes vertebradores, con acciones de apoyo e impulso constantes.

TRABAJAMOS CON INSISTENCIA Y CONSTANCIA EN APORTAR HERRAMIENTAS A LOS SOCIOS

Desde ese ámbito autonómico, es necesario mencionar dos actuaciones que se están desarrollando y que son de gran trascendencia para nuestro sector en cuanto que establecen las bases del mismo:

 

  • La elaboración del Plan Sectorial del Hábitat, que persigue poner las bases sectoriales de esta macroactividad, que incluye una cadena de valor completa desde los recursos endógenos (madera, piedra…) hasta la reutilización, reciclaje y gestión de residuos, pasando por la industria de la transformación, el eje de la construcción y las infraestructuras y la industria auxiliar.

Esta coincidencia de actuaciones va a permitir definir y actualizar, como decía, las bases del sector, sus retos y sus objetivos, de forma que podamos aprovechar todo el potencial del mismo, respondiendo de forma eficiente al contexto que he intentado dibujar arriba.

La eficiencia es el arte de cumplir los resultados esperados de forma satisfactoria con el uso del menor número de recursos posibles. AEICE, como Clúster de Hábitat Eficiente, trabaja, con insistencia y constancia, en aportar herramientas a sus socios y al sector, para cumplir los resultados que se persiguen, para responder al contexto y a los retos de la sociedad.

En este sentido, en cumplimiento del Plan Estratégico 2018-2022, AEICE ha venido desarrollando diferentes acciones de colaboración y capacitación entre los diferentes agentes de la cadena de valor del sector, así como proyectos de innovación para optimizar la respuesta a los diferentes objetivos, alineándose con los mismos.

En la última etapa del Plan Estratégico en que nos encontramos, podemos reconocer con claridad las acciones y proyectos relativos a la transición verde (rehabilitación, ECCN, economía circular, energías renovables, Life Hábitat), a la transición digital (Bim, Lean, Big Data, IA, Iot…) y a la cohesión territorial (Duero Douro, PTL, Eraes,…) que, de forma ordenada, hemos intentado resumir en esta publicación.

Comenzamos ya, a partir de ahora, a “hilvanar” el próximo Plan Estratégico de AEICE, CLÚSTER DE HÁBITAT EFICIENTE, con el objetivo global de mejorar la competitividad de nuestros socios y del sector, aportando herramientas que permitan optimizar nuestra respuesta al contexto en el que nos encontramos y al futuro que dibujamos, persiguiendo, en definitiva, un sector fuerte, reconocible y tractor de la economía regional.

Y lo haremos, como siempre, con humildad y esfuerzo, con análisis y reflexión, intentando mejorar los errores y maximizar los aciertos, con foco en el valor añadido, pero, sobre todo, lo haremos con vosotros, con todos nuestros socios y colaboradores, con todos los agentes interesados, porque, como ya sabéis:

Juntos, más lejos!